Cero Redes Sociales




 Hace una semana decidí eliminar las aplicaciones de las redes sociales de mi teléfono celular. Quería ver si era suficientemente fuerte para no volverme loca por querer entrar a ver qué pasaba. Yo siempre fui de las personas que pensaba que si no entraba en las redes sociales un día se perdía de algo. Por eso necesitaba entrar cada 15 minutos. Esta acción me llevaba a perderme de momentos importantes con mi familia, con mi esposo e hijos. Me llevaba a ponerme ansiosa por querer ver qué pasaba en el mundo de las redes sociales, me desconectaba de Dios y de mi misma.
Quería descubrir cuan adicta estaba o estoy a las redes sociales.

Bueno, debo mencionar que esta decisión la tome el viernes pasado a las 9:00 o 10:00 pm, así que fue fácil soltar el teléfono a esa hora. Mi meta era estar 7 días, pero solo logre estar 5. Para mí eso fue un logro. Los primeros días estuve súper tranquila, aunque tome el celular varias veces tratando de buscar que hacer. El día cuatro, fuimos a la playa y una vez allí, sentía la necesidad de abrir Instagram y grabar algunas historias para mostrar lo que estaba haciendo, pero solo me limite a disfrutarme ese momento con mi esposo e hijos.

Ahora quiero contarles lo que descubrí en esos días sin redes sociales.

El mundo sigue girando. Aunque pensemos que el mundo se va a detener porque nosotros no estamos activos en las redes sociales, eso no sucederá. La vida continúa para todos.

No nos perdemos de nada. Si eres como yo, que pensaba que me iba a perder de alguna noticia, foto, estado o video de alguien, quiero decirte que no. No te perderás de absolutamente nada, lo que tus amigos o familiares compartan seguirá ahí y una vez vuelvas a las redes, puedes ponerte al día si es tu deseo. Además, si hay alguna noticia buena o mala, que necesites saber, la noticia va a llegar a ti de alguna forma. No hay necesidad de las redes sociales.

Tenemos más Tiempo. Cuántas veces hemos dicho, “el tiempo no me da”. Créeme que una vez que eliminas las redes sociales de tu teléfono celular, descubrirás que tienes tiempo para hacer todo lo que debes hacer en el día. Es impresionante las horas que perdemos, viendo la pantalla de nuestro teléfono.

Estarás más enfocada/o. Podrás disfrutar y estar más enfocado en las personas que te rodean, en las cosas que haces. Las conversaciones son más interesantes, los juegos con tus hijos son más entretenidos. El tiempo para leer es mucho más tranquilo. Y te darás cuenta de cosas, que antes no, ya que estabas muy metida/o en las redes sociales.

Menos ansiedad. Los minimalistas dicen: Si tu teléfono está constantemente “a punto de morir”, entonces tal vez no es el teléfono que tiene problemas. Al no tener la preocupación de que “tengo que verificar mis redes sociales” obtendrás una vida más tranquila. Tus días serán mucho más relajados y tu teléfono celular siempre tendrá batería.

Este experimento me gustó mucho y descubrí que puedo vivir completamente sin redes sociales o por los menos tomar 1 o 2 días en la semana para eliminar las aplicaciones de mi teléfono y conectarme con todo y todos a mí alrededor.


Sin un teléfono celular, sin internet, sin televisión, el mundo sigue girando. –The Minimalists

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