El Principito me Salvo


Hace dos días vi a mi esposo jugar un juego en su teléfono y le salió un anuncio del juego (Valga la redundancia) Township. Y dije, ¡OH QUIERO DESCARGARLO! Y obviamente lo hice. No lo utilice hasta el día siguiente en la noche, donde mi esposo estaba jugando su jueguito, mis hijos estaban en mi cuarto, leyendo y jugando y decidí probar a ver de qué se trataba el juego.

Bueno pues eres dueño de una ciudad, y tienes una granja, y vas sembrando, cosechando, vendiendo, poniendo casas, tiendas. Y todo se trata de trabajar mucho, para vender y poder comprar y tener cada vez más casas y lugares donde las personas puedan vivir, comprar y pasar el tiempo en tu ciudad.

Tengo que decirles que me sentí adicta al juego demasiado rápido. Es impresionante como los gráficos, los colores, la música y sonido del juego te hacen sentir tan bien. Al punto de perder tu día jugando sin darte cuenta. Aunque no estuve 1 día completo jugando, si estuve unas 2 horas en la noche y el día siguiente estuve unas 5 horas entre rato y rato. Mientras veía una película con mis hijas, sentía la necesidad de verificar  el teléfono a ver si las vacas y las gallinas habían comido. Ver si ya habían puesto leche y huevos, si mi siembra habría crecido y si las casas se habían terminado de construir.

Luego decidí ver la película El Principito, que definitivamente tiene un mensaje maravilloso. Sobre no vivir como te dicen que tienes que hacerlo, si no de vivir de la forma que a ti te haga feliz, de enfocarte en solo una cosa a la vez y de jamás olvidar ser niño. Cuando termine de ver la película respire y no puedo negar que jugué un poco más jajaja y al final decidí borrarlo. Si no fuera porque he obtenido poco a poco una mente minimalista (si se puede llamar así) no lo hubiera hecho.

No quiero pasar mis días, mirando el teléfono, con ansiedad para ver cómo va mi ciudad, y tampoco quiero que mis hijos crezcan de esa forma. Me da sentimiento y coraje de no haber encontrado el minimalismo mucho antes en mi vida. Tengo 3 adolescentes y una pre-adolescente y es difícil poder enseñarles ahora, que estar horas frente a un videojuego no es vida. Que no debemos olvidar realmente lo que es ser niños. Que hay que jugar, reír y gozarse la vida al máximo. Y sobre todo que no debemos hacer lo que otros hacen porque “es normal” o “está bien” hacerlo. Me reúso a ser adicta a un juego, me reúso a hacer adicta a cualquier cosa porque está bien o es normal. Quiero vivir, leer, aprender, crecer como persona, sin olvidar la niña que hay dentro de mí y sobre todo quiero ser un ejemplo a seguir para mis hijos.  No podemos dejarnos llevar por la publicidad, ella está hecha para hacernos caer en la tentación de comprar, jugar, ver, y hacernos adictos a todo.

Definitivamente tengo que decir que El Pricipito y El Minimalismo me han salvado.




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